Ella es Sofía Suarez, profesora de matemáticas, sociales y lengua y literatura en segundo de básica, más conocida como “La profe Sofi”. Nació el 14 de marzo. Es una persona llena de valores y con un corazón enorme, para así dar lo mejor de ella para la formación de los más chiquitos del Martim. Nos cuenta que le gustan todos los colores, pero en especial el rosado, el morado y más que todo depende de la época; por ejemplo en estos momentos por Navidad es fan del rojo y el verde.

Nos cuenta que su vida cambió hace cuatro años, con el nacimiento de su hija Fiorella, pasó de leer Kafka e ir al gimnasio, a leer libros infantiles e ir al parque, actualmente no tiene mascota pero por muchos años su perrita Pelusa la acompañó.

Empezó sus estudios académicos en el colegio Manuela Cañizares y fue cocinera, su formación universitaria la continuó en la universidad Salesiana, su vocación en todo lo que es ayudar, compartir y colaborar, trabajó en otros colegios,  para finalmente  en el 2014 llegar al Martim Cereré, y brindar sus conocimientos a los más pequeños de primaria. 

Lo que más le apasiona de su trabajo es el poder brindarles todo su amor a las almas más inocentes, que le ayudan a crecer como persona y aprender cada día más sobre ellos. Como profe se acuerda muchas experiencias pero una que nos pudo contar fue cuando los chiquitos se escapaban al parque de cocos, porque creían que ahí iban a poder encontrar al conejo de pascua o al duende Sací Pereré, en sí es la inocencia de los niños que les marca como profesores.

Un sueño que Sofia quiere cumplir es ir pueblo por pueblo, para así poder cumplir con la meta de haber aportado y dejado su granito de arena, y de está manera ir construyendo un mundo mejor. “Nada es Imposible y todo lo que quiera lo voy a lograr”. Sofia espera que en un futuro más jóvenes se unan a este valor para que así los niños que más lo necesitan puedan aprender y descubrir el mundo en el que vivimos. Su meta más grande es poder tener su propio centro infantil. 

Lo que Sofia mejoraría en el colegio, sería incluir a los más pequeños en los eventos y proyectos que se realicen, ya que son muy capaces y pueden brindar todos sus conocimientos de diferentes maneras e incluso con una imaginación, dinámica y mentalidad más abierta.

“Disfruten toda la maravilla que tienen en frente cada día, disfruten y agradezcan por lo que tienen. Vayan viviendo el día y vayan construyendo esas formas de ser, creer y de buscar soluciones, para que sean ese orgullo que como profesores sabemos que van a lograr”, es el consejo que la profe Sofia nos deja a nosotros los estudiantes.