El profesor Tomás Ayala es un apasionado de la enseñanza de historia y estudios sociales. Fuera de las aulas, disfruta de la música latinoamericana y la lectura.

En su primer año en el colegio, destaca el alto nivel de inglés de los alumnos y el ambiente humano que se respira. Aunque su vocación docente fue accidental, ahora ama su profesión y anima a los estudiantes a seguir su pasión.

Valora la libertad que tiene para innovar en sus clases, le gusta salir del aula y realizar actividades lúdicas con los alumnos, siempre con un objetivo de aprendizaje.

Sus momentos favoritos del día son los recreos y las actividades especiales de los cursos. Si no fuera profesor, probablemente se dedicaría a la música.

Se ha sentido muy a gusto en su primer año, le ha encantado conocer a los alumnos y le parece muy interesante el sistema de que los profesores tengan su propia aula y sean los alumnos los que roten.

Su primera impresión del colegio fue de sorpresa al ver sus instalaciones, y se ha sentido muy bien acogido tanto por alumnos como por otros profesores.