Hoy en el martim recibimos con orgullo a la Orquesta Sinamune, junto con su talentoso grupo de coreógrafos. Juntos, en este día emblemático del 21 de marzo, conmemoraron el Día del Síndrome de Down en una presentación que cautivó a todos. La unión entre la música y la danza llenó el escenario de emociones y celebración, mientras la institución se unía para honrar la diversidad y la inclusión. En este espectáculo, el Martim no solo fue anfitrión, sino también un ejemplo vivo del valor de la integración y el apoyo mutuo en la sociedad.
En esta presentación, el grupo nos deleitó con una variedad de canciones populares que abarcan diversos géneros y estilos musicales. Desde «La Caderona», hasta clásicos como «My Way», «El Violinista en el Tejado» y «El Chulla Quiteño», fueron interpretados con gran talento y dedicación. El repertorio incluyó muchas otras sorpresas que mantuvieron al público cautivado y emocionado durante todo el espectáculo. La diversidad musical reflejó la riqueza y la versatilidad del talento presente en el escenario, demostrando una vez más que la música es un lenguaje universal que puede unir a personas de todas las edades, culturas y habilidades.
Al final de este espectáculo, el presentador anunció que pronto tendrían otra presentación, invitándonos este próximo 5 de abril, al escenario de la Casa de la Música, donde la Orquesta Sinamune volverá a presentarse, prometiendo una experiencia igualmente inolvidable. Para un cierre espectacular, la orquesta ofreció la última canción, motivando a todo el público a unirse en un baile de integración y amistad. Con este gesto, dejaron en los corazones de los presentes la alegría y la energía contagiosa de su música.